miércoles, 9 de septiembre de 2009

Poblado Minero de Puchoco-Schwager


El poblado minero de Puchoco-Schwager se encuentra ubicado en la región del bio-bio, comuna de coronel, 32 km. Al sur de concepción, la capital regional

Junto con la poblado minero de lota, fue protagonista de la extracción carbonífera a gran escala que se desarrollo en la llamada “cuenca del carbón”, desde mediados del siglo XIX hasta el cierre de las minas en 1994.

El nombre de puchoco-schwager proviene del sector geográfico conocido con el termino Mapuche Puchoco (agua que sobra) y de Federico Schwager Maginnes, uno de los precursores de la industria carbonífera en coronel y fundador en 1892 de la “Compañía Carbonífera y de Fundición Schwager”, tras la explotación iniciada en la zona por industriales como, Jorge Rojas Miranda (fundador de coronel), Juan Mackay, Guillermo Delano y Matias Cousiño.

Dentro del patrimonio minero de Pucho-Schwager encontramos un legado de arquitectura patrimonial construida principalmente en las décadas del 30, 40 y 50 por arquitectos contratados por la compañia carbonifera, como Hernan Vega y Luis Arretz.

A esto se suma un abundante patrimonio intangible conformado por costumbres, celebraciones, leyendas, comidas e instituciones tradicionales de la cultura minera.

Coronel - Historia del Carbon




A comienzos del siglo pasado Coronel era ocupado por indígenas pacificados que compartían el territorio con algunos españoles y mestizos. Entre los mapuches se pueden citar a los Millabú, Catrillanca, Namoncura, Regumilla y los Millabú. De los españoles y mestizos se encontraban los Orellana, Sáez, Carballo y Mora. En 1804 Juan José Mora compró a Isidoro Neculpí terrenos en Coronel. Uno de sus descendientes, Francisco de Paula Mora arrendó a don Jorge Rojas sitios para instalar un campamento, minero. Esto ocurriría el 30 de agosto de 1849, fecha establecida como de fundación de Coronel.
Coronel a mediados del siglo pasado Don Juan Mackay describe Coronel de la siguiente forma: “En el verano de 1845 visité los puertos de Coronel i Lota... Coronel era la soledad mas completa, ni un rancho se encontraba en sus playas, pero en las lomas vecinas se veía una que otra habitación, donde vivían los primeros moradores que por allí se establecieron en pequeños lotes de terrenos comprados a los indios primitivos que aún poblaban esos contornos en reducido número”. Pedro Pablo Figueroa da su impresión de Coronel con las siguientes palabras: “Frente de esta colina llamada de Puchoco, que en idioma araucano quiere decir agua de hongos, se estendía una bahía circular, estensa y arenosa, donde se extinguían suavemente las olas, la cual se denominaba Playa Negra i en la que existía un solo rancho de pescadores, que constituía toda la población de la caleta”.
La actividad carboníferaA mediados del siglo pasado el desarrollo de la minería del cobre y la navegación a vapor se transformaron en una creciente demanda de carbón.Las primeras explotaciones de carbón en Coronel se realizaron en Roble Corcovado, a cargo de los hermanos Puelma, magnates del trigo.Posteriormente instalan faenas Jorge Ramón en Playa Negra, don Juan Mackay en Merquín y Tomás Urmeneta en Obligado.Sin embargo, los yacimientos más importantes y que perduraron fueron los de Guillermo Délano, en Puchoco, y los de Federico Schwager, iniciados al norte del estero Boca Maule. De aquí surgiría la Compañía Schwager.Finalmente se empezó a explotar los yacimientos de Buen Retiro, propiedad de la familia Cousiño.En 1854 se informaba a la Intendencia de la escasez de mano de obra en las faenas del camino Tomé Chillán, debido a la absorción que de ella hacían las minas de carbón. Cinco años más tarde se advertía al gobierno de posibles sublevaciones de peones en Playa Negra: eran las primeras manifestaciones de una larga gesta social.
Coronel, cabecera departamental
En 1854 la población de Coronel llegaba a los 2.864 habitantes. Dos años más tarde, dando cumplimiento a la norma que ordenaba organizar poblaciones en los puertos habilitados, el intendente informaba “de la demarcación de 24 manzanas cuadrilongas, correspondientes al primer trazado urbano de la ciudad”.El centro político administrativo se desplaza desde el área agrícola al emergente centro minero y portuario. Coronel reemplaza a Santa Juana como cabecera departamental, el 30 de mayo de 1865. Al mismo tiempo se crean los servicios de Aduana y Tesorería, y se da forma legal a la Capitanía de Puerto. El Censo de 1865 arrojó para Coronel una población de 8.530 habitantes.La Actividad PortuariaDebemos recordar que en aquellos años el Cabo de Hornos y el Estrecho de Magallanes eran las vías que comunicaban los océanos Atlántico y Pacífico, por lo que Coronel y Lota ocupaban un lugar estratégico como reabastecedores de carbón para los barcos provenientes de Europa o el borde oriental de América. De lo anterior se puede desprender la importancia que adquiere tempranamente la actividad portuaria en la historia de Coronel, por cuanto a ello se sumaba el embarque de carbón destinado a las fundiciones de cobre. Mediante Decreto del 14 de julio de 1854 se declaraba a Coronel Puerto Menor para la exportación de carbón y aprovisionamiento de los barcos que recalaran en su bahía. Diez años más tarde, por Decreto fechado 20 de agosto de 1864, es ascendido a Puerto Mayor, pudiendo, en tal condición, exportar carbón y recibir maquinarias del extranjero. En 1865 funcionaban 2 muelles. En 1875 se autorizó a la Compañía Carbonífera del Playa Negra la construcción de un muelle. El año 1877 se agrega el muelle de la compañía Schwager, con lo que se elevaba a 4 número de ellos. Más tarde se agregarían los de Buen Retiro, el de pasajeros o “fiscal” y el de la Compañía Explotadora de Lota y Coronel, entre otros.
Los FerrocarrilesEl transporte de carbón impulsó el desarrollo del ferrocarril. Don Federico Schwager es autorizado en 1877 para construir un tendido que conducía la producción desde sus establecimientos de Boca Maule a la bahía. Un hecho de real importancia para toda la zona carbonífera fue la construcción del ferrocarril de Concepción a Los Ríos de Curanilahue. Esta obra era iniciativa de don Gustavo Lenz, que obtuvo la autorización correspondiente en 1885, cediendo sus derechos a la empresa inglesa “The Arauco Company Limited”. Las faenas de construcción se iniciaron en 1886, y su segunda sección, correspondiente al tramo San Pedro Coronel, entró en funciones el 24 de diciembre de 1888. El 18 de febrero de 1890 se inauguraba el puente ferroviario sobre el Biobío. En 1887 se autorizó la construcción del Ferrocarril que uniría los establecimientos de Buen Retiro con un muelle situado frente a la actual calle Serrano. Este tendido presentaba dos singularidades: un túnel de 350 metros que cruzaba bajo el cementerio, y su altura, por cuanto pasaba sobre la ciudad a 7 metros de altura, por lo que se llamó ferrocarril “aéreo”.
Crece el centro urbano
Con el fin de enfrentar los problemas relacionados con la salud, se fundó, el 6 de noviembre de 1867, una Junta Directora de Establecimientos de Beneficencia, de la que saldría el Hospital, que nace oficialmente el 28 de abril de 1868. En 1872, se otorgó a Coronel el rango de Puerto Mayo Marítimo. El 5 de enero de 1875 se le concedió el mandato de ciudad, asumiendo don Cornelio Saavedra como autoridad administrativa y militar. Una más eficiente administración requiere de nuevos servicios, y es así como se establece el Servicio de Registro Civil. El 5 de enero de 1875 se le concedió el mandato de ciudad, asumiendo don Cornelio Saavedra como autoridad administrativa y militar. Una más eficiente administración requiere de nuevos servicios, y es así como se establece el Servicio de Registro Civil. El 7 de diciembre de 1886 se estableció un Juzgado de Letras. A fin de agilizar las comunicaciones con Concepción se autorizó el funcionamiento de la West Telphon Co. En febrero de 1888. Al terminar el siglo XIX, Coronel era una ciudad dotada de servicios públicos, con medios de comunicación expeditos y un transporte mejorado. No obstante todos los adelantos apuntaban, en lo fundamental, a servir la actividad económica más que a su población, que carecía de una infraestructura y equipamiento urbanos adecuados. El siglo XX traería éstos y otros adelantos.
Iniciando el nuevo sigloEl 24 de diciembre de 1902 la Ilustre Municipalidad aprueba la colocación de adoquines en las principales calles, que eran, como ahora, Manuel Montt y Los Carrera. Hasta entonces las calles eran de tierra, polvorientas en verano y fangosas en invierno. En 1897 se funda la Sociedad Unión de Obreros Coronel Puchoco, y en 1903 la Sociedad de Socorros Mutuos 21 de Mayo, a la que se sumaría más tarde la Unión Nacional. Las tres se encuentran activas, y constituyen un monumento social que nos enorgullece, como testimonios de una época en que la solidaridad era un valor y se practicaba. El crecimiento de la ciudad aumentó los riesgos de incendios. La respuesta fue la fundación del Cuerpo de bomberos de Coronel. El gestor de la idea fue don José Messina, y su primer bomba una Marrywether a vapor. Junto con celebrarse el Centenario de la Nación se autorizó a don Pedro Burgos la instalación de una planta generadora de electricidad y la distribución de la misma. La Planta Eléctrica estuvo instalada en Sotomayor número 1, frente a la calle Serrano y a un costado del ferrocarril de Buen Retiro. A principios de siglo Coronel estaba en todo su esplendor carbonífero, portuario y comercial. En 1910 nuestra ciudad contaba con representantes consulares de Alemania, Brasil, Estados Unidos, Méjico, Perú, Portugal , Suecia y Uruguay. Pero la época de oro del Coronel cosmopolita llegaría a su fin con la apertura del Canal de Panamá, que evitaba el paso por el sur del continente. En 1911 era rebajado a la condición de Puerto Mayor de Segunda Categoría, y empieza a emerger Talcahuano como el puerto regional.
Coronel y la lucha obreraLas condiciones de vida de los mineros del carbón no sólo fueron denunciadas por agitadores sociales o dirigentes políticos. Un lotino, Baldomero Lillo, con su libro Sub Terra, inauguró la literatura social describiendo crudamente como vivían y trabajaban estos chilenos. Muchos de los cuentos de Lillo tienen como escenario las tierras de Coronel. Por más de medio siglo, se soportó la explotación, las humillaciones y la miseria. En el fondo de la mina hervía una caldera. La explosión social se produjo en 1920. Entre las peticiones estaban la jornada de 8 horas y el fin de las fichas y pulperías, es decir, el derecho al descanso y la libertad de comprar donde lo que se eligiera. La movilización de los mineros de Coronel fue liderada por un joven anarquista, Carlos Barrientos, y logró sus objetivos primordiales luego de una huelga de 45 días. La victoria fue un paso adelante en la dignificación de los mineros y en el mejoramiento de las condiciones de vida del pueblo. A partir de 1920 Coronel empieza a gozar del esfuerzo de sus hijos. Coronel sigue avanzando. En 1918 funcionaba un Liceo Particular de Señoritas, dirigido por doña Berta Acevedo. Por aquellos años se dictó la Ley de Instrucción Primaria Obligatoria, resistida por algunos sectores patronales. Coronel empieza a vivir un período de relativa tranquilidad, con adelantos productos de la internalización de parte de los excedentes generados por el carbón, y de una mayor preocupación de las autoridades. En 1936, por decreto con fecha 9 de mayo, se crea el Liceo de hombres de Coronel, que inicia sus clases el 18 de agosto de ese año. Un acontecimiento político de trascendencia es el triunfo del Frente Popular en 1938. Asume la presidencia de Chile el maestro Pedro Aguirre Cerda, que pone en marcha un ambicioso proyecto de industrialización del país, en el marco de una política de sustitución de importaciones, llamada también de “crecimiento hacia adentro”. La industria y la electrificación se constituyen en una demanda de carbón, lo que se habrá de traducir en una activación de la economía local y de toda la zona. Al iniciarse la década de los 40, las 24 manzanas originales se habían extendido más al sur de la actual calle Bilbao, y avanzaban hacia el norte siguiendo la prolongación de calle Montt. Se encontraban consolidados los barrios La Colonia, Cerro Obligado, Lo Rojas y Villa Mora. El comercio se extendía junto con la ciudad, y eran cerca de 400 las partes otorgadas por la Municipalidad. En 1941 se inician las faenas d instalación del alcantarillado, una necesidad urgente para una población que llegaba a los 28.027 habitantes. El 15 de mayo de 1943, a las 11 horas, se inaugura el puente carretero sobre el Biobío, lo que marca la declinación del tren como medio de transporte hacia Concepción. Este mismo año se terminan los trabajos de alcantarillado y se hincan los de pavimentación de las calles céntricas. En 1944 se inicia la construcción del Mercado Municipal, el mismo que encontramos actualmente; al año siguiente se dispone el reemplazo de la vieja cárcel pública.
Un Cabildo Abierto
En 1946 se organizó un Comité de Defensa y Adelanto de Coronel, presidido por su Alcalde Fidel Mellado, ex dirigente minero. Este Comité convocó a un Cabildo Abierto el día 4 de agosto de ese año. Entre las resoluciones se encontraban las siguientes: Sector Industrial: Se solicita agilizar la instalación de la Siderúrgica de Huachipato y fomentar la pesca industrial. Sector Agrario: Se pidió la aplicación del Plan Agrario del Gobierno, para conformar un proyecto de ley para pavimentar el camino a Concepción y mejorar los caminos del interior. Educación y Deportes: Se puedo solicitar la creación de escuelas, granjas, de Artesanos y Vocacional, esta última para niñas. Como gran parte de las iniciativas populares, las propuestas del Cabildo debieron esperar muchos años para concretarse, y algunas, quizás la mayoría, simplemente se olvidaron. En 1948 nuestra comuna marca un hito en la promoción de la mujer, al se electa Alcaldesa doña Elena Bustos, profesora primaria, que ejerció magníficamente sus funciones aportando al desarrollo de la ciudad.
Camino, Hospital y Liceo para Coronel
Los primeros años de la década del 50 marcan el punto de mayor desarrollo de la minería del carbón. En Schwager laboraron alrededor de 6.000 personas, y el carbón alimentaba la minería, la industria y el transporte. Una ley dictada en 1951 destinaba parte de los excedentes generados por el carbón a la construcción del camino a Concepción. El mismo año la Compañía Schwager pone en funcionamiento el Muelle Mecánico de Jureles, quedando atrás los lanchones y remolcadores que hasta ese momento realizaban las faenas de embarque. En 1952 la población llegaba a los 36.280 habitantes, lo que hace imperativo extender la cobertura de salud y educación. Con este fin se inaugura el actual Hospital, diseñado para a cubrir las necesidades de esa población, y en 1956, gracias a las gestiones de su Rector, don Antonio Salamanca Morales, se hincan los trabajos de construcción del actual Liceo Coeducacional de Coronel.
Un año fatídicoCoronel recordará siempre el año 1960 por dos acontecimientos dolorosos: La huelga Larga y el terremoto de mayo. A principios de ese año se inicia una acción que movilizó a los mineros de toda la cuenca carbonífera. La defensa de sus reivindicaciones llevó a una huelga que duró más de tres meses. Las familias mineras repartieron los niños a hogares de todo Chile, que solidarizaban con el movimiento. El 21 y 22 de mayo dos violentos sismos sacudieron el sur del país, siendo el área más dañada la de Valdivia. Este movimiento telúrico puso fin al movimiento social. Con el terremoto de 1960 empieza a transformarse la ciudad, y se inicia su crecimiento lineal hacia el norte, a la búsqueda de Concepción. Al norte se encontraba en etapa de construcción la actual población Camilo Olavaria; su entrega se apuró para dar cabida a familias provenientes de los lugares más afectados por el sismo. El censo de fines de 1960 entregó una población de 60.296, es decir, 24.000 más que en 1952. Junto con crecer al norte, la ciudad empieza a adquirir otra fisonomía, dominando las poblaciones uniformes, es serie. En 1960 comienza un proceso de pérdida de identidad de Coronel.
Rumbo al siglo 21
La actividad minera desaparece fundada en la explotación de los recursos pesqueros y forestales, los que justifican un terminal de carga. Paralelamente se establecen dos Parques Industriales al norte de la ciudad. Coronel ha soportado en las últimas décadas un proceso inmigratorio, proveniente principalmente de Lota. El incremento poblacional eleva las cifras de mano de obra de las empresas instadas en la comuna es débil, y en parte importante es satisfecha desde otras no se desarrolla. Aumentan las cifras de producción pero la calidad de vida de la población se mantiene o se agrava con la contaminación que se suma a las condiciones socioeconómicas históricamente deficitarias. Esta es la plataforma desde la que debemos pensar el futuro; nuestro imperativo, construirlo con crecimiento económico, equidad y respeto por el medio ambiente, es decir, con desarrollo.

Don Federico Schwager


Es poco y nada lo que se sabe sobre la persona de Federico Guillermo Schwager I, tan solo que, nació en Alemania el año de 1789, en la ciudad llamada Zerbst, en el estado de Sajonia Anhalt. Por razones que hasta el día de hoy son totalmente desconocidas, emigró de su suelo natal para venirse a establecerse a Chile, según Hardey Evans, a principios del siglo XIX habría llegado al país, pues, en 1830 se le halla en Valparaíso plenamente arraigado, figurando su nombre entre los fundadores del club Alemán.El señor Schwager I contrajo matrimonio con una dama de origen inglés llamada Mary Maginnes con quien tuvo cinco hijos, de los cuales, Federico Guillermo Schwager II y Carolina, una de sus hijas, son los que más directamente relacionados estuvieron con la empresa carbonífera. Su actividad se vinculó al negocio de seguros y también como agente de una compañía de vapores en la compra de carbón. No muy afortunado en los negocios que emprendió, murió en julio del año de 1861, dejando una cantidad de deudas considerable su familia; cinco años más tarde fallece su esposa, en el mes de noviembre de 1866.El hijo, al que se le suele confundir con el padre, Federico Guillermo Schwager II, es quien con el transcurso del tiempo transformó en el magnate de la industria del carbón en Coronel. Los únicos datos biográficos fueron entregados por su amigo Albert Chadowicki, (1836-1907) de origen Polaco, casado con Marie Reclam una de las hermanas de Minna Claude (Reclam), suegra de Marion Schwager; Chadowicki, que también era profesor de música, tenia la particular costumbre de llevar diarios de vida, donde menciona varios pasajes a "fred", como solía nombrarle.En esas crónicas se caracteriza a "Fred" Schwager, como un ­hombre de gran habilidad y energía en las tareas que emprendía; sin embargo, Federico Schwager sufrió durante gran parte de su vida por consecuencia de un feble estado de salud. Con la muerte de su padre y una deuda de $150.000 que le dejó, debió afrontar momentos de angustia, a pesar de todo demostró tener tenacidad y una fortaleza espiritual inquebrantable, que le permitió salir del paso airoso. Era el tiempo en el cual se encontraba asociado a los Délano y con un monumental puesto en la industria, que tanto honor le daría.La primera intervención de Schwager II en la industria del carbón, se tiene para el año de 1855, cuando le hizo un préstamo a Ramón Rojas por la suma de $12.000. Posteriormente tendría como sitio de iniciación de sus explotaciones el sector de "Boca Maule".Cuando transcurría el año de 1866, el señor Schwager II se vio obligado a abandonar la "Compañía de Puchoco", a causa de un grave accidente ocurrido en Valparaíso a. bajar de un tranvía. Por tal situación vende todas sus acciones y también las de sus hermanas a G. Délano en la cantidad de $600.000 pesos, al igual que un derecho sobre las minas de Boca Maule, que otorgaría una cantidad de $0,25 pesos por tonelada extraída.Luego de un reposo de tres años. Schwager volvió de lleno a sus negocios y con renovados bríos, de ahora en adelante, se comienza a estructurar su empresa, en los primeros años de 1870, siendo hacia el 1875 que adquirió a Antonio Mora. descendiente de María Mora, el 50% de los derechos correspondientes a los territorios de "Boca" y "huerta" ubicados en la ribera de: estero Maule, por un monto anual de $1.000 pesos; dos años más tarde. compra todos los derechos, tanto de extracción del mineral como de la ocupación del suelo.En estos sitios se extrajo carbón de piques de escasa profundidad, el principal de ellos se le denomino "Pique Nº 1", más tarde reemplazado por los Chiflones conocidos bajo el nombre de "Santa María" y el "Chiflón Nº4”, que entró en servicio el año de 1876, el que fue una espectacular obra de i11geniería; los trabajos para habilitarlo tuvieron sus inicios en el 1870, perforándose sobre una roca ubicada entre dos mareas. la que aún con buen tiempo era azotada por las o1as.66 Este chiflón estuvo en actividad hasta el 1924, teniéndose que cerrar por la crisis que afectó a la industria, por entonces, y por la decisión tomada por la gerencia de la empresa de concentrar la explotación en el sector de Boca Maule.Estas minas, como las demás de Coronel, fueron trabajadas siguiendo el sistema de "muralla larga" (Long wall), registrándose la fuerte influencia llegada desde el otro lado de: Atlántico, específica mente Inglaterra; fueron los propios técnicos e ingenieros británicos que implementaron tal sistema en las labores extractivas.El mismo Federico Schwager sentía una profunda admiración hacia Inglaterra, según Chadowicki, "El país con el cual después de Chile, se identificaba mejor", de tal modo, su descendencia alemana sólo quedó en eso, hablaba y escribía perfectamente el inglés, ocupó el cargo de vicecónsul británico en Coronel.Por otra parte extendió su industria a otros sectores, es así, como en el año de 1886, firmó un contrato con José Antonio de la Jara, para explotar en mutua sociedad las minas de carbón encontradas en el fundo "Canta Rana", propiedad de este ultimo. Este convenio consta de siete artículos en los cuales, de la Jara sede sus terrenos con todo lo disponible en ellos, cuyos lindes son: por el norte, la calle Montt; por el sur, los Carrera; al oriente, la calle Freire; y al occidente, la calle de Rivera. En cuanto a la administración esta queda en responsabilidad de Federico Schwager, sin ninguna participación de José A. De La Jara; las ganancias quedan repartidas entre ambos por igual, disponiéndose en el artículo 5 llevar dos libros por separado a razón de todos los capitales invertidos, las ventas y producción, pudiendo de La Jara en cualquier ocasión hacer su inspección. Por último Schwager, se reserva el derecho de retirar todo lo aportado cuando así lo estimase necesario, devolviendo los terrenos poniendo así término al contrato.Pero las influencias de este magnate del carbón, no quedaron sólo arraigadas a la explotación de minas, sino que, también incursionó en el ámbito de las inversiones ferroviarias, concediéndole terrenos fiscales para la construcción de un ferrocarril a vapor entre su establecimiento carbonífero y el puerto, por decreto ley fechado el 02 de septiembre de 1878.Durante los últimos años de su vida, se vio en la obligación de viajar a Londres para someterse a nuevos tratamientos médicos, producto de su inestable estado de salud; la partida se realizó a principios del año de 1882, la cual es retratada por Albert Chadowicki en uno de sus diarios:"Nuestras despedidas fueron cortas pero emocionantes, desgraciadamente él no era ahora. sino una ruina de lo que había sido i abrigábamos pocas esperanzas de volver a verlo, a menos que el reposo y el viaje restablecieran su salud en grado mayor de lo que se podía esperar. Iba acompañado de sus hermanas Marion i Carolina i de los niños de Marion, Freddie i Minna, además de dos sirvientas i una nurse, i de mrs Petera como dama de compañía. Una verdadera caravana."En junio 24 del año 1892 muere Federico Guillermo Schwager Maginnes frente a las costas de Brasil (Pemambuco), permaneciendo durante dos años sepultado en el extranjero. Luego de ese tiempo, sus restos fueron repatriados para ser depositados en el cementerio protestante de Valparaíso. En su testamento dejó una donación generosa para hacer un hospital en beneficio de la población de Puchoco.En el año 1892, Federico Schwager, había hecho efectiva la compra de las minas de Punta de Puchoco, inundadas en 1881, a los descendientes de G. Délano (sucesión Délano), que en conjunto con los establecimientos de Boca Maule y la "Huerta", constituyeron la "Compañía carbonífera y de fundición Schwager". Fundada el año de 1892, por expresa voluntad de Federico Schwager, antes de su fallecimiento. Para esto, se fijó un capital inicial de la Compañía en 500.000 libras esterlinas, lográndose llevar a cabo la extracción mineral de las minas, "Santa María", Chiflón N° 4, posteriormente, pique "Colico", "Pique N° 2," Y "Chiflón N° 6", que paralizaron sus labores en las dos primeras décadas del siglo XX, continuándose la explotación en los Chiflones N° 1,2 Y 3, de Puchoco.F. G. Schwager no tuvo descendencia, puesto que no se casó, que perpetuase su poder y control de la empresa por el construida. Esta acción correspondió a su hermana Carolina Schwager de Mac­Donald, la que continuó explotando las vetas de carbón, y aumentó los caudales de la empresa carbonífera. Cuando murió en el mes de mayo de 1928, dejó a sus sobrinos Federico Claude Schwager y Minna Claude Schwager una herencia de $48 millones de peso, quedando a cargo de Federico Claude la administración de la Compañía para la década de 1930.La familia Claude es originaria de Francia, de tendencia protestante, (Hugonotes), sus antepasados fueron expulsados luego de la dictaminación del Edicto de Nantes en el 1685, radicándose en Holanda, y más tarde, en Alemania.Los Claude que se ligan a la familia Schwager, pertenecen a la tercera generación, y provenían de la ciudad Polaca de "Danzig", siendo Adolfo Claude III quien desposa a Marión Schwager en el 1860. El matrimonio Claude Schwager, tiene dos hijos, Federico Claude Schwager y Minna Claude Schwager (nombre dado en honor a su abuela).Ellos son los últimos representantes del apellido Schwager, que estuvieron ligados a la compañía carbonífera de fundición.